Día 3. 45 km

Dicen que lo que realmente merece la pena suele costar esfuerzo, sudor, y tal vez lágrimas,también dicen que los comienzos nunca son fáciles.
Llegue a ushuaia con la tristeza y melancolía de dejar atrás a mi familia,  despues de 37 horas de duró viaje ,con retrasos incluidos, y con la inquietud de saber que las alforjas se habían  quedado en Roma por culpa de la compañía aérea. Por suerte el día siguiente pude recogerlas.

Ushuaia a primera vista me pareció más grande de lo que imaginaba, una ciudad  hecha deprisa, que poco a poco se va comiendo parte del monte que majestuosamente preside la ciudad más austral del mundos. Los edificios en su mayoría no sobrepasan las 3 alturas,muchas de las casas son de madera, las calles están bastante estropeadas y los perros callejeros son los verdaderos dueños de ellas. Luego está la avenida principal con sus tiendas de deportes y  de electrónica básicamente, el puerto comercial y turístico y la antigua cárcel hoy reconvertida en museo. Una ciudad cara,sin grandes atractivos si no fuera por el aura salvaje y legendaria por la que esta impregnada y su increíble entorno natural.

El museo merece la pena, en el se puede conocer la historia de los antiguos pobladores de tierra de fuego, los Yámana, las distintas expediciones matiritimas de grandes aventureros y investigadores,la carrera por la conquista de la antartida, a tan sólo 1000 kilómetros de ushuaia y por último la historia de una de las cárceles más duras y legendarias del mundo.

Los yámanas, curioso como pese al frío iban semidesnudos estos aborígenes nómadas. Extinguidos con la llegada del los europeos.

Pero lo que realmente merece la pena en ushuaia es todo lo que le rodea, sus majestuosas montañas, el canal de  beagle y el parque nacional tierra de fuego. La entrada al parque, 170 pesos argentinos suma y sigue, esta a unos 12 kilómetros de ushuaia. Se puede recorrer el parque en coche de forma superficial, mucha gente así lo hace, pero, no es un delito no perderse por esta maravilla una vez que estas aquí? Están locos estos humanos.... El tiempo me acompañó, y la verdad es que bien merece pagar lo que te piden por conocer este lugar mágico.

Mañana seguramente me ponga ya en ruta, puerto natales es el siguiente objetivo, cerca de 800 kilómetros de distancia que esperó hacer sin mojarme mucho.             

Ayer nevaba en ushuaia, hoy el sol se habre paso entre las nubes, al fin y al cabo, por muy duro y desapacible que sea esto, la primavera esta empujando poco a poco, esperó que me acompañe y mientas yo pedaleo ella deshiele los montes y saque del letargo invernal a las flores.